The Smiths y la colección visual más bella y original del pop
The Smiths fue una de las agrupaciones que más (tal vez la que más) empeño e importancia le ha puesto a la obra visual que acompañó e inmortalizó todas las tapas de sus discos y sencillos. Específicamente, Morrissey fue el curador de toda la estética que hasta la fecha desata locura y obsesión entre coleccionistas.
La selección de imágenes, los colores, los mensajes ocultos que Morrissey escogía y que marcaba en la matriz de los viniles y la forma en la que se presentaban sus sencillos (ya sea en formato de 7″ o de 12″), fue todo un acontecimiento revolucionario.
Descifrar el contenido de cada imagen en cada sencillo es tratar de interpretar el mensaje que Morrissey buscaba para ejemplificar más allá de las letras y la música, un espacio atemporal en su música influenciado por una lista interminable de referencias en el universo pop. Portadas ya clásicas de piezas indispensables como “Hand In Glove”, “This Charming Man”, “Barbarism Begins At Home”, “Ask” o “Shoplifters Of The World United” fueron una muestra más del potencial creativo con el que Morrissey pretendía pasar a la historia. Para él, el arte visual de sus sencillos y discos de larga duración así como la estética que envolvió a The Smiths, no era algo menor. El aspecto visual siempre fue tan importante como la música que crearon y uno de los ejemplos donde el control artístico reside en su totalidad en los músicos.
Las imágenes que Morrissey escogía tenían una fuerte correlación con sus influencias y los colores que escogía daban la impresión de que buscaba crear algo al más puro estilo warholiano. ¿Quién en la historia de la música ha puesto la cara de Elvis Presley, James Dean, de una drag queen, de estrellas del cine inglés de los 60´s, actores menospreciados o a Truman Capote para promocionar un sencillo? Sólo un obsesionado y estudiosos de la cultura pop occidental como Morrissey podía inmortalizar a sus ídolos o a personajes que ejemplificaban con un gesto, el significado de una canción.
Una colección visual donde la belleza, el arte, la simplicidad y la innovación marcaron la pauta de algo que no se volverá a repetir como ese inmaculado legado audiovisual que nos dejó The Smiths.
