Kate Bush: El regreso de la ermitaña británica

“I am delighted to announce that we will be performing some live shows this coming August and September.I hope you will be able to join us and I look forward to seeing you there.We’ll keep you updated with further news on the web site. Meanwhile, all details of concert dates and tickets are in the note below. Very best wishes,” Kate

Kate Bush está de vuelta después de 35 años de no presentarse formalmente con una gira. Serán quince conciertos en el legendario Hammersmith Odeon de Londres en agosto y septiembre; ese lugar que vivió el “asesinato” de Ziggy Stardust en 1973 y el mismo lugar donde seis años después, Kate Bush terminaría su último tour.

Debido al aislamiento que la alejó de los escenarios desde 1979 y con muy pocas aparaciones públicas en décadas, parece que Kate Bush entra en la categoría de “artista de estudio” aunque sus legendarios shows dicen lo contrario. Con diez discos de estudio y escribiendo letras llenas de referencias literarias y excentricidad surrealista desde los 13 años, Kate Bush fue uno de los primeros musicos en tener el control completo de su arte. También fue Bush (sólo anticipada por Bowie), la cantante que llevó una experiencia completa a una audiencia en un concierto al incluir factores teatrales e histrionicos en el escenario que iban mucho más allá de la música. Su originalidad y potencia vocal, la definen como uno de los artistas británicos más originales de todos los tiempos.

La compositora. La multi-instrumentista. La coreógrafa. La bailarina. La productora. La interprete. La delgada linea entre el art-pop, el art-rock, el pop barroco, la música clásica, la literatura y la definición ambigua de un artista donde la sobrevalorada palabra “ecléctico” toma un significado real.